Lección 358 UCDM
LECCIÓN 358
Ninguna invocación a Dios puede dejar de ser oída o no recibir
respuesta. Y de esto puedo estar seguro: Su respuesta es la única que realmente
deseo.
1. Tú que
recuerdas lo que realmente soy, eres el
único que recuerda lo que realmente deseo. 2Hablas en Nombre de Dios, y, por lo tanto, hablas
en mi nombre. 3Y lo que me concedes procede de Dios Mismo. 4Tu Voz, entonces, Padre mío, es mía también, y lo
único que quiero es lo que Tú me ofreces, en la forma exacta en que Tú eliges
que yo lo reciba. 5Permíteme recordar todo lo que no sé, y deja que
mi voz se acalle, mientras lo recuerdo. 6Y no dejes que me olvide de Tu Amor ni de Tu
cuidado, antes bien, ayúdame a mantener siempre presente en mi conciencia la
promesa que le hiciste a Tu Hijo. 7No dejes que olvide que mi ser no es nada, pero que mi Ser lo es todo.
Video de Mich Gaymard