Lección 301 UCDM
LECCIÓN 301
Y Dios Mismo enjugará todas las lágrimas.
1.
Padre, a menos que juzgue no puedo
sollozar. 2Tampoco puedo experimentar dolor o sentirme
abandonado o creer que no se me necesita en este mundo. 3Éste es mi
hogar porque no lo juzgo, y, por lo
tanto, es únicamente lo que Tú quieres que sea. 4Hoy
lo quiero contemplar sin condenarlo, a través de ojos felices que el perdón
haya liberado de toda distorsión. 5Hoy quiero ver Tu mundo en lugar
del mío. 6Y me olvidaré de
todas las lágrimas que he derramado, pues su fuente ha desaparecido. 7Padre,
hoy no juzgaré Tu mundo.
2.
El mundo de Dios es un mundo feliz. 2Los
que lo contemplan pueden tan sólo sumar a él su propia dicha y bendecirlo por
ser causa de una mayor dicha para ellos. 3Llorábamos porque no
entendíamos. 4Pero hemos aprendido que el mundo que veíamos era
falso, y hoy vamos a contemplar el de
Dios.
Video de Mich Gaymard